Euskal Herria, inagotable fuente de cultura, nos regala uno de los discos claves del año 2016. Aunque Matheria, el cuarto trabajo de Childrain, salió a la calle en noviembre de 2015, ya se está haciendo notar, y sin lugar a dudas lo seguirá haciendo a lo largo del presente año en curso. Indispensable escucha para los amantes de la buena música, sin más, porque no caben etiquetas, comparaciones, ni dudas de ningún tipo cuando se trata de hablar de un disco semejante. Para apreciar Matheria simplemente hace falta tener oídos.
Sin duda, Childrain vive ahora mismo un momento dulce, su etapa álgida como banda, que se verá potenciada en lo sucesivo a raíz del éxito obtenido con este último trabajo, en el que nada está puesto al azar. Matheria no es un conjunto de canciones, ni 10 temas numerados según algún rebuscado criterio musical. Matheria es, en su totalidad, una historia. Con principio, final y , por supuesto, capítulos. Matheria sabe a ciencia y a filosofía escrita con rabia. Desde Creation of the Sun, pasando por Live in Winter, hasta Requiem o Renaissance, pura conciencia de vida desde los sentimientos de existencia más profundos.
El disco empieza fuerte, con garra, y se mantiene en lo más alto en todo momento. Espectacular trabajo de la batería, implacable de principio a fin, sin desmerecer el resto de instrumentos que, juntos y unidos con la voz, dan vida a un trabajo compacto y potente, donde también hay cabida para el instrumental como Renaissance, misterioso y evocador. Por otra parte, es preciso destacar el detalle de algunos arreglos del piano, que dotan al disco de un ligero tinte melancólico pero, sobre todo, elegante.
De este modo, el quinteto vasco ha sabido conjugar a la perfección una buena ejecución respecto a la parte técnica, grandes dosis de sentimientos que expresar, una pizca de literatura y un asombroso sentido de la vida y de la música, que ya les ha valido algún que otro reconocimiento, más allá del que yo pueda expresar en estas líneas, como ha sido la inclusión de Matheria en el top de lanzamientos a nivel estatal del año 2015 y, por supuesto, el éxito rotundo de la gira Matheria Tour 2016. ¡Larga vida, Childrain!