No hay mejor manera para arrancar la mañana del diluvio universal que escuchando buena música.
Esta vez, para suerte de mis vecinos, no me ha tocado reseñar a una banda de Brutal Death, Grindcore o Flamenco Pop.
Hoy vengo a hablaros de Black Bottle Riot. Un cuarteto holandés que con su fusión entre el Blues clásico y el Rock, han creado un sonido personal muy agradable.
Música para paladares exquisitos. Creada con amor y fermentada en barricas de roble como los mejores vinos.
Si, por si al leer esta última frase no os habéis dado cuenta ya os lo digo yo. Esta reseña irá en tono vitivinícola (que aunque el término incluya las palabras vino y cola no tiene nada que ver con el kalimotxo).
Al abrir el celofán y otear la sobria portada que cubre este disco nos invaden unos pensamientos a Tom Darby o Big Joe Turner.
Pero en el primer sorbo de "Time & Time Again", esas primeras impresiones se transforman radicalmente. Generando un gusto en boca a los mejores Black Sabbath del maestro Iommi.
El segundo trago de esta botella es "Cast Aside", un poco mas fuerte que el primero.
Presenta un cuerpo rudo y contundente. Presencia magistral de la guitarra de Mike Sedee, acompañado por u ingrediente añadido a este buen vino llamado Sebastiaan Van Bijlevelt.
Mi abuelo decía que no existía nada mejor que un buen vino. Y creo que para mi, ese vino viene en Black Bottle Riot.
"One with the dust", se deja disfrutar en paz y tranquilidad. Corte ideal para disfrutar en una fría noche de invierno mientras disfrutamos del danzar
del fuego en la estufa a leña. La calidez del tono vocal de Simon Snel y esos pasajes lentos que percibimos a mitad del tema son una perfecta combinación al sabor fuerte que golpea nuestro paladar en forma de solo de guitarra.
En este trago tenemos además la alegría de sentir otros gustos que no solo acompañan, si no que engrandecen el gusto de esta copa.
Esos gustos añadidos son el de Mike Roelofs al órgano Hammond, Tim Van Delft a la percusión y Floor Kraayvanger acompañando el trabajo vocal.
Ya me llevo bebida media botella de este elixir holandés y como sabéis os voy a dejar la otra mitad para que la bebáis en la paz y armonía de vuestros hogares.
Gracias a los amigos de Lestrato por enviarnos este magnífico trabajo. Esperamos ansiosos la visita de esta gran banda por las tierras del mejor vino español.